Cuando tiene EPOC, las sibilancias, la falta de aire y la opresión en el pecho son síntomas comunes. Las sibilancias son un silbido o chirrido al inhalar o exhalar. La opresión en el pecho es la sensación de dificultad al respirar profundamente o de dolor al respirar. Puede causar una sensación de falta de aire.
¿Cómo causa la EPOC sibilancias y opresión en el pecho?
La EPOC es una afección que impide que sus pulmones funcionen correctamente. La función de los pulmones es introducir y expulsar aire en el cuerpo. Dentro de los pulmones, el aire se mueve a través de tubos llamados vías respiratorias. En las vías respiratorias sanas, el aire entra y sale fácilmente. Con la EPOC, los pulmones y las vías respiratorias se dañan. Este daño hace que el revestimiento de las vías respiratorias se hinche y se obstruya con mucosidad. Las vías respiratorias también pueden colapsar. Entonces, el aire no entra ni sale del cuerpo con normalidad. Esto puede provocar sibilancias y opresión en el pecho.
EPOC es un término que se utiliza para dos afecciones principales: la bronquitis crónica y el enfisema. En ambas afecciones, las vías respiratorias y los pulmones se dañan. Generalmente, el daño se produce por respirar irritantes durante un período largo de tiempo. El principal irritante que causa la EPOC es el humo del cigarrillo. Otros irritantes son la contaminación, el polvo, el humo y los productos químicos.
En el caso de la bronquitis crónica, las vías respiratorias dañadas producen más mucosidad de lo normal. La mucosidad es un líquido espeso y pegajoso; atrapa el humo y otros irritantes dañinos que se inhalan. Esto ayuda a proteger las vías respiratorias. Pero demasiada mucosidad puede estrechar las vías respiratorias. La bronquitis también puede hacer que las vías respiratorias se hinchen. Los músculos que rodean las vías respiratorias pueden contraerse. Estos problemas estrechan aún más las vías respiratorias. Eso significa que menos aire entra y sale de los pulmones.
El aire contiene oxígeno, un gas que el cuerpo necesita para respirar. En los pulmones sanos, el aire se mueve hacia los sacos pulmonares (alvéolos), que son racimos de sacos redondos al final de las vías respiratorias. El oxígeno pasa de los sacos pulmonares al torrente sanguíneo y, de esta forma, se transporta al resto del cuerpo. A medida que el cuerpo consume oxígeno, se desecha un gas llamado dióxido de carbono. Este gas vuelve a los sacos pulmonares. Luego se exhala fuera del cuerpo. Este proceso se denomina intercambio de gases.
En el caso del enfisema, el intercambio de gases no funciona correctamente. Esto se debe a que los alvéolos están dañados, además de las vías respiratorias, que no son tan elásticas como deberían ser. Se vuelven flexibles y pueden colapsarse al exhalar. Así, el aire viciado se atrapa en los sacos pulmonares. Entonces, no se puede inhalar suficiente aire fresco. Esto hace que sea más difícil respirar profundamente.
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| Vía respiratoria con bronquitis crónica. |
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| Vía respiratoria con enfisema. |
Tratamiento para las sibilancias y la opresión en el pecho
No hay cura para la EPOC. Pero algunos tratamientos pueden ayudar con las sibilancias y la opresión en el pecho:
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Broncodilatadores. Estos medicamentos ayudan a abrir las vías respiratorias para mejorar la respiración.
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Medicamentos combinados. Incluyen un broncodilatador y un esteroide. Los esteroides ayudan a evitar que el revestimiento de las vías respiratorias se hinche o se inflame. Esto ayuda a reducir la hinchazón y la producción de mucosidad.
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Antibióticos. Una infección respiratoria puede empeorar los síntomas de la EPOC. Los antibióticos son medicamentos que ayudan a tratar infecciones.
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Rehabilitación pulmonar. Este programa enseña maneras de aliviar los síntomas de la EPOC. Incluye consejos sobre ejercicio, postura correcta, cómo conservar energía y comer bien para mejorar la respiración.
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Terapia de oxígeno. Cuando el nivel de oxígeno en la sangre es demasiado bajo, su proveedor de atención médica puede recetarle oxígeno. O, cuando los pulmones no pueden llevar suficiente oxígeno a la sangre, puede obtener oxígeno adicional. El oxígeno se puede usar a veces o casi siempre.
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Cirugía. Suele optarse por la cirugía en caso de síntomas graves cuando otros tratamientos no han ayudado. La cirugía extirpa las partes más dañadas de los pulmones.
Su proveedor de atención médica trabajará con usted para decidir el mejor tratamiento para usted.